sábado, mayo 28, 2005

ALMA

Tristeza oculta veo en esoso ojos,
que tantas ganas de vivir tienen.
Amargura y llanto veo en el abrazo doloroso de
un recuerdo, tu boca lanza a mil por hora
la desesperanza de un amor empastado, y tus manos me dicen que
quieres olvidar tu pasado.
Pero mírame fijamente como lo haces al hablerme,
¿no te das cuenta que muero por besarte?...
escuchame, por favor, dulce y nerviosa mujer que vine a ver,
escucha este pequeño aliento,
donde no hay verguenza de mostrar nada,
escuchame en tu propio ser,
escuchame con mucho cariño y devoción,
escucha mi poesía, que es solo para tí, mujer,
mi vida, mi perdición.
TOBIAS