jueves, octubre 20, 2005

Una rosa como tú, se compara con el inmenso mar de abrazos que me diste,
la cantidad de besos que no se fueron, que quedaron en el recuerdo de una
noche.
Una noche como hoy, que no puedo olvidar.
Tu mi mujer que con solo mirarme me haces caer en el profundo pozo de la
desesperacion por que quiero besarte, quiero sentir tu cuerpo desnudo junto
al mio, llenandose de el roce tenue de tus pechos en el mio.
Injusta noche que no me deja dormir pensando en ese dia bendito en que nos
concedimos un deseo magico, un pensamiento impuro de sexo desenfrenado,
de caricias que no paraban de recorrer un camino que no se veia tenia fin.
Tu mi corazon que cuando pienso en ti me devuelves el alma al cuerpo, me
devuelves lo que se me fue en un abrazo ajeno, que se perdio en el horizonte
lejano de una capital llena de humo, en un cigarrillo que se quemo en otra
cama. Un beso.
TOBIAS